24 Ene 2019 GIMENO DENUNCIA QUE EL GOBIERNO DE BARKOS RENUNCIA A ATENDER LA DIVERSIDAD EN LA EDUCACIÓN PORQUE CONSIDERA QUE YA LO HACE LA RENTA GARANTIZADA

El portavoz socialista de Educación en el Parlamento, Carlos Gimeno, denuncia que el Gobierno de Barkos parece haber renunciando a destinar recursos para atender la diversidad en el ámbito educativo porque considera que ya lo hace la Renta Garantizada. Algo grave, dice Gimeno, porque sin Educación no hay inclusión y porque es en ese ámbito educativo donde está la base de la igualdad de oportunidades y el mejor camino para la cohesión y el ascensor social. Por tanto, dice, los socialistas seguiremos defendiendo que la diversidad se atienda también en la Educación, y para eso hacen falta recursos. Ahora mismo, añade, faltan ocho millones, algo que ha denunciado el PSN-PSOE pero que sindicatos como ELA también han puesto sobre la mesa.

Gimeno señala que se han incorporado 1.500 alumnos y alumnas fuera de plazo al sistema, y en lugar de reforzar los servicios y los recursos, el Gobierno de Barkos reduce en 268 las sesiones para audición y lenguaje y en 1.499 las de pedagogía terapéutica. Así, dice el portavoz, es imposible atender esas necesidades específicas y es imposible que la Educación Pública cumpla no solo su función pedagógica sino también su función social.

El portavoz socialista lamenta que Solana traslade su incapacidad al Vicepresidente Laparra y se ampare en las prestaciones de la Renta Garantizada para excusar su falta de recursos para atender la diversidad. Eso, señala, es no entender nada y no saber qué función cumple la Educación y qué función cumple la Renta Garantizada. Pero sobre todo, señala, es una muestra más de la incapacidad de gestión, la ausencia de planificación, y el desdén de la Consejera y el Departamento hacia una población tan sensible que, además, se concentra en su gran mayoría en centros públicos y en castellano.

Recuerda que en el curso 2014/15 el 56 por ciento del alumnado en situación desfavorecida estaba escolarizado en centros públicos y que, cuatro años después, esa cifra ha crecido hasta el 64 por ciento. Más alumnado con menos recursos. Así, dice, no se puede garantizar la calidad educativa.